Werner Mauss in der Internationalen Presse  

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Cambio
 

La razón para este sitio web: aclarar la desinformación divulgada

Wochenspiegel

El robo de las joyas fue ahora aclarado

Junio 12, 2000

 

El agente del Hunsrück Werner Mauss y sus casos espectaculares.

Mauss: „Mis investigaciones fueron comprobadas“.

 

El asalto al joyero Düe de Hannover, después de 19 años hay informaciones nuevas: ahora se encontraron joyas del supuesto robo con un peso de 10,8 kilogramos. Un papel central jugo el agente Werner Mauss de Hunsrücker en las investigaciones de aquel entonces en 1982. El, en cooperación con una comisión especial probó la culpabilidad del joyero.

 

Retrospectiva: Después que el asaltado joyero René Düe fue encontrado sangrado en el piso de su negocio, la policía abrigo sospecha, de que el asalto fuese fingido. El motivo: Los supuestos ladrones, dos personas de aspecto mediterráneo de cabellos negros, así los describen los testigos presénciales, abandonaron la joyería con dos maletines para documentos. Pero las joyas robadas abarcaban 3400 piezas únicas y pesaba más de 40 kilos. Cómo se iban a poder transportar esto en dos maletines para documentos? Para esto no habrían sido suficientes ni siquiera tres maletines para documentos. ¿Por qué estaba apagada la cámara de vigilancia? ¿Por qué se encontraba antes del asalto la caja fuerte abierta? Preguntas, que ocupaban a los investigadores.

 

La policía formó una comisión especial, primeramente compuesta por la policía estatal de Hannover y después por la brigada regional de investigación criminal de la Baja Sajonia. Un fiscal extraordinario instruyó en el procedimiento contra Düe debido a un fraude al seguro ya que las preciosas joyas de oro, que Düe expresamente había tomado en comisión para hacer una exposición, estaban aseguradas por 13,2 millones de marcos. La brigada regional de investigación criminal(LKA) recurrió en aquel entonces al el empleado civil Werner Mauss de la Oficina Federal de Investigación Criminal(BKA). Mauss era considerado por los investigadores en toda Europa como el hombre para los casos difíciles, con un nombre falso “Claude” Mauss se acercó al joyero Düe en acuerdo con la LKA de la Baja Sajonia, para buscar comprobarle a Düe la simulación de un delito. Después de largos meses, como dice hoy Mauss "creando medidas de confianza”, creyó René Düe a su nuevo amigo “Claude”. Düe habló con Mauss alias Claude sobre su asalto. Debido a la presión que ejercía la policía con las investigaciones, Düe junto con su cuñado Achim B., pidieron a Mauss que los ayudara a poner una pista falsa, que hiciera pensar que fue el proveedor de joyas, para apoyar su credibilidad, Mauss acepto su propuesta y volo a New York.

 

Düe se sintió seguro y trajo una maleta grande, entre las toallas escondidas 15 notables joyas, que el había denunciado como robadas. Esto fue para la comisión especial un indicio claro de que Düe había fingido el asalto. El LKA actuó, Düe lo detuvieron y en 1983 lo condenaron a siete años y medio de prisión. El Tribunal Federal Supremo revocó el veredicto a causa de un error en el procedimiento, Düe lo declararon después inocente. Una parte de la prueba no pudo ser empleada. El caso se convirtió para el agente Mauss en una pesadilla. En una comisión investigadora ocurrió algo que para un agente secreto puede ser mortal, el agente fue desenmascarado. Su mayor capital, su identidad. Si bien es cierto circuló en la prensa la primera foto borrosa de él. Y desde ese entonces lo acompaña la fama de trabajar con métodos dudosos. Esa sospecha desapareció con seguridad desde la semana pasada teniendo en cuenta las investigaciones contra Düe. Ya que ahora en un trabajo de renovación se descubrió 10,8 kilos de joyas de oro en Hannover. Empacadas de forma cuidadosa en once cartones de envió. Las joyas fueron encontradas en un trabajo de renovación en el techo de una habitación cuidadosamente escondidas bajo un revestimiento de madera. Lo precario en esto: es que hasta comienzos de los años 80 tenia un joyero una orfebrería. Su nombre: Friedrich Düe, nada menos que el padre de René Düe. Para el agente Mauss es esto una comprobación tardía „el robo en 1981 fue fingido, yo no cometí ningún error“. Mauss declaro: No cabe duda, que ningún otro pudo ser sino Düe, quien escondió las joyas en la casa de su victima en el techo de la habitación.

 

Con el permiso cordial de la editora.

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