Werner Mauss in der Internationalen Presse  

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Abendzeitung


Münchner Abendzeitung, publicado el 6 de diciembre 2000

 

escrito de Peter Issig

„Con el respaldo del canciller“

 

Su nombre es Mauss. Werner Mauss. Es el detective alemán más controvertido. El redactor del AZ, Peter Issig se encontró con el. Naturalmente en secreto.

 

Es una leyenda. El agente secreto Werner Mauss. La versión alemana de James Bond. Algo mayor que Pierce Brosnan, no tan elegante como Sean Connery, pero mucho más controvertido y siempre viajando en misión secreta.

El hombre, que según sus propias palabras, “condujo a la detención” más de 1.600 delincuentes y liberó más de 100 rehenes, pero que también fue objeto de una comisión investigadora parlamentaria y con ello metió en un aprieto a políticos y jefaturas de policía, sabe lo que debe a su reputación. Puso en escena nuestro encuentro de manera " 007". Después de semanas de acuerdos, de repente la confirmación: "Espere mañana a las 14 horas en el lobby del hotel X en Francfort. Allí telefoneamos para concertar donde nos encontraríamos".


No trae guardaespaldas. "Nunca he hecho eso. Siempre estuve en contra de trabajar con la fuerza. El mejor arma es mi cabeza", dice Mauss. No le falta confianza en sí mismo. A fin de cuentas, puede pasar revista a una carrera notable. El agrónomo de Essen financió con trabajos de camarero y vendedor de aspiradoras su formación profesional como experto en criminología. Durante esto, tuvo la idea de hacerse detective. Siguieron clases privadas con profesores de la escuela de policía.

 

Su primer gran caso, una historia de separación, lo resolvió rápidamente y con discreción. Esto se divulgó. Dos años después Mauss tiene oficinas en Londres y Locarno. Su estilo de vida se vuelve elegante. Conduce automóviles veloces y pronto se compra un Cessna. “He volado 3.700 horas contra el crimen – sin copiloto”. Pero también da mucha importancia a la disciplina. "Nunca he fumado, ni bebido y tampoco tuve nunca líos con mujeres - y soy hábil para los negocios, que también es una forma de disciplina.

 

El tenía evidentemente mucha ventaja sobre los investigadores del estado. Al parecer sin el más mínimo esfuerzo se infiltra en organizaciones criminales internacionales. "Yo era como un camaleón, me adaptaba al entorno". Sólo una vez hizo uso de las armas. En 1968 quiso detener en el aparcamiento de la autopista en el lago Langwieder, cerca de Munich, al rey de los fugitivos Alfred Derks: "Derks intentó atropellar a un policía de Colonia. A petición de un policía, disparé para socorrerlo con mi calibre 38 Spezial a través del vidrio posterior de su automóvil, le di en el hombro y salvé la vida del policía". Derks pudo escaparse, pero dos años después cayó en la red de Mauss. Entre sus métodos ya por aquel entonces se encontraba - mucho antes de la controvertida vigilancia secreta - la intercepción de conversaciones privadas.

 

Entretanto, Mauss con sus 60 años se ha vuelto más tranquilo. Hasta ahora, los organismos oficiales callan sobre el caso Mauss. Es cierto que vive bien, en su mansión de Hesse, de su plan de jubilación, que le fue concedido "por sus méritos en el marco de las medidas de defensa contra el terrorismo".
Pero los tiempos como "arma secreta" de la Oficina Federal de Investigación Criminal en lucha contra el crimen organizado (ex jefe del BKA, Horst Herold) han pasado a la historia. A pesar de todo, de Mauss aún se puede esperar cualquier cosa.

 

 

El “Stern” tiene que disculparse con Mauss

 

En el caso de la liberación de la familia alemana Wallert de las manos de secuestradores filipinos en la isla de Jolo, fue llamado por la dirección del grupo parlamentario alemán SPD. "Yo ya había traído a la cabeza política de los rebeldes de Abu Sayyaf a Alemania, pero Berlín ya había decidido a llevar la operación a través de Libia". El Ministerio de Asuntos Exteriores no se mostró muy entusiasmado. El ministerio difundió que Mauss había complicado las cosas, el “Stern” informó de esto, pero más tarde tuvo que pedir disculpas a Mauss.

 

Mauss sabe que tiene muchos enemigos y personas que lo envidian. También, porque tenía una estrecha relación con el ministro de la cancillería de Kohl, "008" Werner Schmidbauer, y porque nunca pudo comprender las dudas jurídico-estatales de sus críticos sobre sus métodos en la zona intermedia entre la legalidad y la ilegalidad. "¿Qué quiere decir aquí zona sin legislación?" Me he movido por la zona límite, pero nunca en la zona sin legislación. Mis acciones fueron acompañadas y aseguradas por la fiscalía”. Muchas cosas se desarrollaron por aquel entonces en una zona poco definida de la legalidad, Mauss inició "medidas para crear confianza", quiere decir, que también se movió dinero con el objetivo de acercarse a los maquinadores. "Después de muchos años de labor pionera, los derechos de los agentes secretos en Alemania están hoy día bien definidos y asegurados jurídicamente", se justifica el agente.

 


Todavía tiene en la sangre ese placer por la caza con el sistema Mauss. Como construyó leyendas, también sospecha constantemente de intrigas. "Intento moverme siempre sin ser reconocido. Estoy en la "lista de la muerte" de varias organizaciones terroristas".

 

Desde mediados de los años 80, Mauss ha trasladado su territorio operativo principal a Sudamérica. Primero por encargo de Mannesmann y el gobierno alemán. El grupo industrial confiaba en Mauss, porque él lo protegió de una notable pérdida de prestigio. Mannesmann debía eliminar los barriles de veneno Dioxina de Seveso. Pero 41 recipientes con el veneno mortal habían desaparecido. "Como colaborador civil del BKA, conducido por el ministro del interior Friedrich Zimmermann“, Mauss se hizo pasar por contrabandista de basura y se introdujo así en el ambiente criminal. "Mi receta para el éxito es secreta, pero el modelo es siempre el mismo: Entro en las organizaciones, escogió a uno o dos colaboradores. Ellos no saben que están trabajando para mí, pero son el eslabón más débil de la cadena. En algún momento, se presenta por sí sola la oportunidad de actuar".
De esta manera, Mauss detectó a los barriles de Seveso poco antes de que fueran vertidos al Atlántico.

 

 

Sudamérica ha cambiado a Mauss

 

También en la guerra civil en Colombia Mauss, quien siempre trabaja junto a su mujer Ida, 21 años más joven que el, encontró que le dieran confianza y acceso a todas partes: "Conocemos a todos; los buenos, los menos buenos y los muy malos".

 


Pero Sudamérica lo cambió. Con el respaldo de la cancillería alemana, Mauss pasó al entorno diplomático. Apoyado por la conferencia episcopal alemana y el gobierno alemán, en diciembre de 1996 en Maguncia se debía llevar a cabo un encuentro con los líderes del Ejército Nacional de Liberación ELN. Mauss preparó el terreno para las negociaciones de paz, debiéndose cumplir la condición de la liberación de 11 rehenes europeos. Pero durante esta acción, él y su mujer Ida fueron detenidos y presentados a la prensa. A partir de ahora, todos conocían su cara - Mauss está "quemado" como agente.

 

Apenas, después de nueve meses en prisión colombiana, el Tribunal Supremo en Medellín declaró al matrimonio inocente de todos los cargos. Finalmente, en 1998 después del dramático retraso, se iniciaron nuevas negociaciones en el convento Himmelspforten en Wurtzburgo (Alemania). Los guerrilleros, la iglesia y el gobierno se sentaron por primera vez en una misma mesa.

 

Pero no fue la caza de asesinos o terroristas lo que Mauss considera fue el momento decisivo en su carrera, sino otro caso espectacular. Hannover, 1981: El joyero Düe es supuestamente asaltado y despojado de piedras preciosas en valor de 13, 6 millones de marcos. ¿Un caso de estafa de seguros? Por encargo de la policía, Mauss le tiende una trampa al joyero. Con el "sistema Mauss" forma - para crear la apariencia - una banda internacional de encubridores de hurtos que muestra interés por los diamantes. Bajo el seudónimo "Claude” vuela a Sydney o incluso sólo para una llamada telefónica a Nueva York.
Con éxito: Düe es puesto en evidencia. En primera instancia es condenado, pero en segunda instancia es declarado inocente: Los métodos de pesquisa no fueron adecuados, dice el tribunal. Las medidas de intercepción adoptadas por la policía no fueron admitidas como prueba. Los controvertidos métodos de Mauss despejaron el camino hacia el poder a la SPD en Baja Sajonia - una comisión investigadora desacreditó el trabajo policial, bajo el gobierno de la CDU.

 

Mauss se siente víctima de una intriga de envidiosos, políticos y periodistas. Además, en este tiempo aparece una imagen borrosa de él y por lo tanto su trabajo como agente secreto es puesto en peligro. Sólo después de que en primavera de 2000 fueran descubiertas las joyas, declaradas como robadas, en el negocio del padre de Düe, Mauss se considera completamente rehabilitado: "Las investigaciones fueron correctas. Pero: "Si no hubiese sido el caso Düe - uno de los menos importantes de mi carrera - ahora la colaboración con el gobierno alemán sería más fácil".

 

¿Qué es lo que a Mauss aún le queda por hacer ? Él quiere juntar otra vez en una mesa interlocutores para el complicado proceso de paz en Colombia. Y para ello ahora intenta "ganarse la confianza del canciller Schröder".

 

Sus casos y affaires más importantes:

 

1976: Mauss detecta el tesoro de la catedral de Colonia en Belgrado.
1976: En Atenas son observados los quioscos que venden la "Süddeutsche". Cuando el terrorista de la RAF, Rolf Pohle , como de costumbre compra el periódico, es detenido - el inicio de la llamada Rasterfahndung (búsqueda reticular).
1987: Una comisión investigadora en Hannover cita a Mauss debido al agujero producido por una bomba en la prisión de Celle. El no se presenta.
1987: El premier ministro de un land, Uwe Barschel, muere en Ginebra, en ese momento Mauss también se encuentra allí. La sospecha de que tuvieron contactos no es confirmada.
1992: Los rehenes del Líbano, Kemptner y Strübing, son liberados. Mauss dice haber entablado los contactos.
1996: se sospecha que Mauss apoya la guerrilla en Colombia.
1998: es puesto en libertad

 

 

Con la amable autorización de la editorial y del señor Peter Issig

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